¿Le apetece relajarse con unas vacaciones en un idílico rincón de Mallorca? Nuestras villas en alquiler en Pollensa son el sitio ideal para disfrutar de la verdadera esencia del Mediterráneo.
El municipio de Pollensa es el más septentrional de la isla, tiene una gran diversidad paisajística gracias a los últimos 26 kilómetros de la Serra de Tramuntana. Si alquila una villa en alquiler en Pollensa disfrutará de la localidad con más kilómetros de litoral marítimo, estará situado en un enclave único entre mar y montaña. El Puerto de Pollensa también forma parte del municipio y delimita con los municipios de Alcudia, Escorca, Campanet y Sa Pobla.
Pollensa es un pequeño e idílico pueblo en el norte de Mallorca lleno de angostas callejuelas que forman un casco antiguo con toda la esencia del Mediterráneo. Los cimientos de Pollensa fueron construidos por los árabes, pero fueron los Caballeros Templarios los que fundaron la iglesia que corona la plaza mayor, Nuestra Señora de los Ángeles. La iglesia posee una decoración barroca, mientras que su campanario se levanta sobre una antigua torre de defensa del siglo XV. Esta zona y sus alrededores están repletos de bares, restaurantes y tiendas artesanales, se trata del único lugar idóneo para iniciar la visita.
El Convento de Santo Domingo, construido en el siglo XVI, fue el hogar de los monjes dominicanos y actualmente es el Museo de Pollensa.
Los Jardines Joan March ubicados en el centro del pueblo exhiben una muestra de plantas exóticas junto a una torre gótica y la figura de Joan Mas, el héroe que salvó a los pollensines de los árabes.
El Puente Romano es una de las construcciones mas emblemáticas del pueblo y cruza el torrente de Sant Jordi, a día de hoy se sigue utilizando.
Si busca más planes qué hacer en Pollensa, El Calvari es la opción ideal. El acceso al Oratorio que se eleva sobre un pequeño monte se realiza a través de 365 escalones o en coche. Esta construcción data del siglo XVIII y contiene una Mare de Déu del Peu de la Creu que data del siglo XIII. Para finalizar la ruta en Pollensa, puede subir al Puig de Pollensa, un monte de 300 metros desde donde se ven unas vistas espectaculares de la Serra de Tramuntana y disfrutar de una de las mejores puestas de sol en el norte de Mallorca.
Comer en Pollensa es saborear la esencia de la comida mallorquina. La zona ofrece una amplia oferta en restauración, tanto de cocina local como internacional. Si quiere comer cocina tradicional mallorquina le recomendamos que pruebe las “sopes mallorquines” elaboradas con pan moreno mallorquín, verduras y carne; también tenemos el “pa amb oli”, el “tumbet”, “arròs brut”, las cocas de “trempó” y verduras, las “panades”, y los “cocarrois”. Mallorca, además, tiene una gran tradición vinícola junto una gran calidad de licores, como el palo, el vino dulce, las hierbas, las cuales se toman con hielo en verano.
En el centro del pueblo abundan las tiendas artesanales donde podrá adquirir embutidos tradicionales como la sobrasada, la longaniza y el butifarrón. Si lo que prefiere es dulce, le recomendamos que pruebe la ensaimada, la “greixonera de brossat”, el “gató” con almendras, los “robiols” y los “crespells”, un postre típico de Semana Santa.
Si desea alquilar una de nuestras villas vacacionales en Pollensa, desde Portvil le recomendamos visitar sin prisas el pueblo, es la mejor manera de sentir su esencia. Estamos enamorados de nuestro pueblo, y con una villa en alquiler en Pollensa seguro que usted también lo estará.
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